Los peores impactos probablemente recaerán en las próximas décadas sobre los países en desarrollo. 3. 142. semanal en lengua española (17 abril 2015), p. 2. No estamos hablando de una actitud opcional, sino de una cuestión básica de justicia, ya que la tierra que recibimos pertenece también a los que vendrán. 118   Consejo Pontificio Justicia y Paz, Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 482. Ap. 147   id., Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2010, 11: AAS 102 (2010), 48. “La falta de reacciones ante estos dramas de nuestros hermanos y hermanas es un signo de la pérdida de aquel sentido de responsabilidad por nuestros semejantes sobre el cual se funda toda sociedad civil”, reflexiona el Pontífice. En el Pan eucarístico, « la creación está orientada hacia la divinización, hacia las santas bodas, hacia la unificación con el Creador mismo ».167 Por eso, la Eucaristía es también fuente de luz y de motivación para nuestras preocupaciones por el ambiente, y nos orienta a ser custodios de todo lo creado. 86   Consejo Pontificio Justicia y Paz, Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 462. Sin ella no se reconoce a las demás criaturas en su propio valor, no interesa cuidar algo para los demás, no hay capacidad de ponerse límites para evitar el sufrimiento o el deterioro de lo que nos rodea. San Buenaventura llegó a decir que el ser humano, antes del pecado, podía descubrir cómo cada criatura « testifica que Dios es trino ». Mientras se elaboraba esta Encíclica, el debate ha adquirido una particular intensidad. Son signos, entre otros, que muestran que el crecimiento de los últimos dos siglos no ha significado en todos sus aspectos un verdadero progreso integral y una mejora de la calidad de vida. Como afirmaba Benedicto XVI en la línea ya desarrollada por la doctrina social de la Iglesia, « para gobernar la economía mundial, para sanear las economías afectadas por la crisis, para prevenir su empeoramiento y mayores desequilibrios consiguientes, para lograr un oportuno desarme integral, la seguridad alimenticia y la paz, para garantizar la salvaguardia del ambiente y regular los flujos migratorios, urge la presencia de una verdadera Autoridad política mundial, como fue ya esbozada por mi Predecessor, San Juan XXIII ».129 En esta perspectiva, la diplomacia adquiere una importancia inédita, en orden a promover estrategias internacionales que se anticipen a los problemas más graves que terminan afectando a todos. En ese sentido, está desnudo y expuesto frente a su propio poder, que sigue creciendo, sin tener los elementos para controlarlo. Un desarrollo tecnológico y económico que no deja un mundo mejor y una calidad de vida integral- mente superior no puede considerarse progreso. El aprovechamiento directo de la abundante energía solar requiere que se establezcan mecanismos y subsidios de modo que los países en desarrollo puedan acceder a transferencia de tecnologías, asistencia técnica y recursos financieros, pero siempre prestando atención a las condiciones concretas, ya que « no siempre es adecuadamente evaluada la compatibilidad de los sistemas con el contexto para el cual fueron diseñados ».128 Los costos serían bajos si se los compara con los riesgos del cambio climático. Son loables y a veces admirables los esfuerzos de científicos y técnicos que tratan de aportar soluciones a los problemas creados por el ser humano. 54   Juan Pablo II, Catequesis (30 enero 2002), 6: L’Osservatore Romano, ed. Un llamamiento decisivo . Así como sucede cuando nos enamoramos de una persona, cada vez que él miraba el sol, la luna o los más pequeños animales, su reacción era cantar, incorporando en su alabanza a las demás criaturas. ii, Const. Los principios enunciados siguen reclamando caminos eficaces y ágiles de ejecución práctica. La humanidad aún posee la capacidad de colaborar para construir nuestra casa común. Catequesis (17 enero 2001), 4: L’Osservatore Romano, ed. Una ciencia que pretenda ofrecer soluciones a los grandes asuntos, necesariamente debería sumar todo lo que ha generado el conocimiento en las demás áreas del saber, incluyendo la filosofía y la ética social. Porque la persona humana más crece, más madura y más se santifica a medida que entra en relación, cuando sale de sí misma para vivir en comunión con Dios, con los demás y con todas las criaturas. El problema es que no disponemos todavía de la cultura necesaria para enfrentar esta crisis y hace falta construir liderazgos que marquen caminos, buscando atender las necesidades de las generaciones actuales incluyendo a todos, sin perjudicar a las generaciones futuras. En la modernidad hubo una gran desmesura antropocéntrica que, con otro ropaje, hoy sigue dañando toda referencia común y todo intento por fortalecer los lazos sociales. ), Irrupción del pobre y quehacer filosófico. 214. Las escuelas de la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora tienen como misión ofrecer una educación integral de calidad, basada en los valores del Evangelio y el sistema educativo de Don Bosco, buscando la formación de todas las dimensiones de la persona para construir un nuevo modelo de sociedad. En la encíclica, el Papa vincula la protección del medio ambiente con la justicia para los pobres y la necesidad de una inversión de marcha en una economía que sólo busca el beneficio. 196. 46   Benedicto XVI,  Catequesis  (9  noviembre  2005),  3: L’Osservatore Romano, ed. 90. 128   Consejo Pontificio Justicia y Paz, Energía, justicia y paz, IV, 1, Ciudad del Vaticano 2013, 57. Es el punto de partida y de llegada de la encíclica del Papa Francisco Laudato sí, de la que celebramos los cinco años desde su promulgación. Si la política no es capaz de romper una lógica perversa, y también queda subsumida en discursos empobrecidos, seguiremos sin afrontar los grandes problemas de la humanidad. Se tiende a creer « que todo incremento del poder constituye sin más un progreso, un aumento de seguridad, de utilidad, de bienestar, de energía vital, de plenitud de los valores »,83 como si la realidad, el bien y la verdad brotaran espontáneamente del mismo poder tecnológico y económico. Cuando alguien no aprende a detenerse para percibir y valorar lo bello, no es extraño que todo se convierta para él en objeto de uso y abuso inescrupuloso. Tenemos demasiados medios para unos escasos y raquíticos fines. items: 3 Legenda maior, VIII, 1: FF 1134. 123   Cf. 110   Discurso a la Pontificia Academia de las Ciencias (3 octubre 1981), 3: L’Osservatore Romano, ed. Introducción En un mundo tan abierto y globalizado como el actual, es cada vez más difícil encontrar grandes sistemas de valores compartidos que tengan la capacidad de afirmar creencias, movilizar conciencias y orientar las acciones individuales de semanal en lengua española (8 noviembre 1981), p. 7. Se hace difícil detenernos para recuperar la profundidad de la vida. 154. 122. Grandes ciudades que dependen de un importante nivel de almacenamiento de agua, sufren períodos de disminución del recurso, que en los momentos críticos no se administra siempre con una adecuada gobernanza y con imparcialidad. Por eso los Obispos de Alemania enseñaron que en las demás criaturas « se podría hablar de la prioridad del ser sobre el ser útiles ».42 El Catecismo cuestiona de manera muy directa e insistente lo que sería un antropocentrismo desviado: « Toda criatura posee su bondad y su perfección propias […] Las distintas criaturas, queridas en su ser propio, reflejan, cada una a su manera, un rayo de la sabiduría y de la bondad infinitas de Dios. No tienen otras actividades financieras y otros recursos que les permitan adaptarse a los impactos climáticos o hacer frente a situaciones catastróficas, y poseen poco acceso a servicios sociales y a protección. Cuando los pobres viven en suburbios contaminados o en conglomerados peligrosos, « en el caso que se deba proceder a su traslado, y para no añadir más sufrimiento al que ya padecen, es necesario proporcionar una información adecuada y previa, ofrecer alternativas de alojamientos dig- nos e implicar directamente a los interesados ».118 Al mismo tiempo, la creatividad debería llevar a integrar los barrios precarios en una ciudad acogedora: « ¡Qué hermosas son las ciudades que supe- ran la desconfianza enfermiza e integran a los diferentes, y que hacen de esa integración un nuevo factor de desarrollo! Por eso, ya no basta hablar sólo de la integridad de los ecosistemas. Nada es extraordinario para ti […] Y sacaste a tu pueblo Israel de Egipto con señales y prodigios » ( Jr 32,17.21). Por otra parte, hay educadores capaces de replantear los itinerarios pedagógicos de una ética ecológica, de manera que ayuden efectivamente a crecer en la solidaridad, la responsabilidad y el cuidado basado en la compasión. En la primera narración de la obra creadora en el libro del Génesis, el plan de Dios incluye la creación de la humanidad. 211. Generalmente, al cesar sus actividades y al retirarse, dejan grandes pasivos huma- nos y ambientales, como la desocupación, pueblos sin vida, agotamiento de algunas reservas naturales, deforestación, empobrecimiento de la agricultura y ganadería local, cráteres, cerros triturados, ríos contaminados y algunas pocas obras sociales que ya no se pueden sostener ».30. 54. «Nosotros mismos somos … La provisión de agua permaneció relativamente constante durante mucho tiempo, pero ahora en muchos lugares la demanda supera a la oferta sostenible, con graves consecuencias a corto y largo término. Esta responsabilidad ante una tierra que es de Dios implica que el ser humano, dotado de inteligencia, respete las leyes de la naturaleza y los delicados equilibrios entre los seres de este mundo, porque « él lo ordenó y fueron creados, él los fijó por siempre, por los siglos, y les dio una ley que nunca pasará » (Sal 148,5b-6). Caritas in veritate (29 junio 2009), 32: AAS 101 (2009), 666. Por consiguiente, también es verdad que la indiferencia o la crueldad ante las demás criaturas de este mundo siempre terminan trasladándose de algún modo al trato que damos a otros seres humanos. 126. Las soluciones meramente técnicas corren el riesgo de atender a síntomas que no responden a las problemáticas más profundas. El sol y la luna, el cedro y la florecilla, el águila y el gorrión, las innumerables diversidades y desigualdades significan que ninguna criatura se basta a sí misma, que no existen sino en dependencia unas de otras, para complementarse y servirse mutuamente ».63. Por eso estamos ante un desafío educativo. Decía Benedicto XVI que « es necesario que las sociedades tecnológicamente avanzadas estén dispuestas a favorecer comportamientos caracterizados por la sobriedad, disminuyendo el propio consumo de energía y mejorando las condiciones de su uso ».135. Caritas in veritate (29 junio 2009), 50: AAS 101 (2009), 686. iii. La sociedad, ¿cómo ordena y custodia su devenir en un contexto de constantes innovaciones tecnológicas? En ese hermoso cántico nos recordaba que nuestra casa común es también como una hermana, con la cual compartimos la existencia, y como una madre bella que nos acoge entre sus brazos: «Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra … No es menos vida, no es una baja intensidad sino todo lo contrario. El amor fraterno sólo puede ser gratuito, nunca puede ser un pago por lo que otro realice ni un anticipo por lo que esperamos que haga. Diálogo hacia nuevas políticas nacionales y locales. WebLa Encíclica Laudato si’ se desarrolla en torno al concepto de ecología integral, como paradigma capaz de articular las relaciones fundamentales de la persona: con Dios, consigo … Pero estamos llamados a ser los instrumentos del Padre Dios para que nuestro planeta sea lo que él soñó al crearlo y responda a su proyecto de paz, belleza y plenitud. 23. Las predicciones catastróficas ya no pueden ser miradas con desprecio e ironía. Es lo que ocurre cuando los movimientos de consumidores logran que dejen de adquirirse ciertos productos y así se vuelven efectivos para modificar el comportamiento de las empresas, forzándolas a considerar el impacto ambiental y los patrones de producción. La disminución de los puestos de trabajo « tiene también un impacto negativo en el plano económico por el progresivo desgaste del “capital social”, es decir, del conjunto de relaciones de confianza, fiabilidad, y respeto de las normas, que son indispensables en toda convivencia civil ».104 En definitiva, « los costes humanos son siempre también costes económicos y las disfunciones económicas comportan igualmente costes humanos ».105 Dejar de invertir en las personas para obtener un mayor rédito inmediato es muy mal negocio para la sociedad. Por eso, los Obispos de Nueva Zelanda se preguntaron qué significa el mandamiento « no matarás » cuando « un veinte por ciento de la población mundial consume recursos en tal medida que roba a las naciones pobres y a las futuras generaciones lo que necesitan para sobrevivir ».78. En este contexto, se vuelve indispensable la maduración de instituciones internacionales más fuertes y eficazmente organizadas, con autoridades designadas equitativamente por acuerdo entre los gobiernos nacionales, y dotadas de poder para sancionar. Simplemente se trata de redefinir el progreso. Centesimus annus (1 mayo 1991), 37: AAS 83 (1991), 840. Los esfuerzos para un uso sostenible de los recursos naturales no son un gasto inútil, sino una inversión que podrá ofrecer otros beneficios económicos a medio plazo. 164   Juan Pablo II, Carta ap. LAUDATO SISobre el cuidado de la Casa común 2. La espiritualidad cristiana propone un modo alternativo de entender la calidad de vida, y alienta un estilo de vida profético y contemplativo, capaz de gozar profundamente sin obsesionarse por el consumo. n. 186-201: AAS 105 (2013), 1098-1105. Es posible alentar el mejoramiento agrícola de regiones pobres mediante inversiones en infraestructuras rurales, en la organización del mercado local o nacional, en sistemas de riego, en el desarrollo de técnicas agrícolas sostenibles. Contra la llamada cultura de la muerte, la familia constituye la sede de la cultura de la vida ».149 En la familia se cultivan los primeros hábitos de amor y cuidado de la vida, como por ejemplo el uso correcto de las cosas, el orden y la limpieza, el respeto al ecosistema local y la protección de todos los seres creados. Cuando permanecen en sus territorios, son precisamente ellos quienes mejor los cuidan. En la Biblia, el Dios que libera y salva es el mismo que creó el universo, y esos dos modos divinos de actuar están íntima e inseparablemente conectados: « ¡Ay, mi Señor! Junto con todas las criaturas, caminamos por esta tierra buscando a Dios, porque, « si el mundo tiene un principio y ha sido creado, busca al que lo ha creado, busca al que le ha dado inicio, al que es su Creador ».172 Caminemos cantando. 171. El impacto de los desajustes actuales se manifiesta también en la muerte prematura de muchos pobres, en los conflictos generados por falta de recursos y en tantos otros problemas que no tienen espacio suficiente en las agendas del mundo.27. Debería ser una mirada distinta, un pensamiento, una política, un programa educativo, un estilo de vida y una espiritualidad que conformen una resistencia ante el avance del paradigma tecnocrático. 173. Sin embargo, hay que agregar que los mejores mecanismos terminan sucumbiendo cuando faltan los grandes fines, los valores, una comprensión humanista y rica de sentido que otorguen a cada sociedad una orientación noble y generosa. Pero también sería equivocado pensar que los demás seres vivos deban ser considerados como meros objetos sometidos a la arbitraria dominación humana. Hay que afrontar el cambio climático, sostiene, para proteger tanto a las poblaciones más vulnerables como al planeta. Ya se han rebasado ciertos límites máximos de explotación del planeta, sin que hayamos resuelto el problema de la pobreza. Para poner sólo un ejemplo destacable, quiero recoger brevemente parte del aporte del querido Patriarca Ecuménico Bartolomé, con el que compartimos la esperanza de la comunión eclesial plena. Necesitamos una conversación que nos una a todos, porque el desafío ambiental que vivimos, y sus raíces humanas, nos interesan y nos impactan a todos. En el mundo hay un nivel exiguo de acceso a energías limpias y renovables. Por otra parte, también se instauró un año sabático para Israel y su tierra, cada siete años (cf. 194. Nunca la humanidad tuvo tanto poder sobre sí misma y nada garantiza que vaya a utilizarlo bien, sobre todo si se considera el modo como lo está haciendo. Sería un individualismo romántico disfrazado de belleza ecológica y un asfixiante encierro en la inmanencia. La paz interior de las personas tiene mucho que ver con el cuidado de la ecología y con el bien común, porque, auténticamente vivida, se refleja en un estilo de vida equilibrado unido a una capacidad de admiración que lleva a la profundidad de la vida. Decía san Buenaventura que, por la reconciliación universal con todas las criaturas, de algún modo Francisco retornaba al estado de inocencia primitiva.40 Lejos de ese modelo, hoy el pecado se manifiesta con toda su fuerza de destrucción en las guerras, las diversas formas de violencia y maltrato, el abandono de los más frágiles, los ataques a la naturaleza. WebSi «el clima es un bien común, de todos y para todos» (23), el impacto más grave de su alteración recae en los más pobres, pero muchos de los que «tienen más recursos y poder económico o político parecen concentrarse sobre todo en enmascarar los problemas o en ocultar los síntomas» (26): «La falta de reacciones Caritas in veritate (29 junio 2009), 67: AAS 101 (2009), 700. WebLaudato Sí. Alabado seas. 176. Finalmente, el bien común requiere la paz social, es decir, la estabi- lidad y seguridad de un cierto orden, que no se produce sin una atención particular a la justicia distributiva, cuya violación siempre genera vio- lencia. El agua que se derrama sobre el cuerpo del niño que se bautiza es signo de vida nueva. Sólo a partir del cultivo de sólidas virtudes es posible la dona- ción de sí en un compromiso ecológico. Remarcó que « no sería verdaderamente digno del hombre un tipo de desarrollo que no respetara y promoviera los derechos humanos, personales y sociales, económicos y políticos, incluidos los derechos de las naciones y de los pueblos ».73 Con toda claridad explicó que « la Iglesia defiende, sí, el legítimo derecho a la propiedad privada, pero enseña con no menor claridad que sobre toda propiedad privada grava siempre una hipoteca social, para que los bienes sirvan a la destinación general que Dios les ha dado ».74 Por lo tanto afirmó que « no es conforme con el designio de Dios usar este don de modo tal que sus beneficios favorezcan sólo a unos pocos ».75 Esto cuestiona seriamente los hábitos injustos de una parte de la humanidad.76, 94. La misma lógica que dificulta tomar decisiones drásticas para invertir la tendencia al calentamiento global es la que no permite cumplir con el objetivo de erradicar la pobreza. 157   Pablo VI,  Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 1977: AAS 68 (1976), 709. Comisión  para Asuntos Sociales, Der Klimawandel: Brennpunkt globaler, intergene- rationeller und ökologischer Gerechtigkeit (septiembre 2006), 28-30. Por ello con expectativa esperamos los acuerdos favorables al cambio … esp. No aparecía como un asceta separado del mundo o enemigo de las cosas agradables de la vida. Ella vive con Jesús completamente transfigurada, y todas las criaturas cantan su belleza. Dada la interrelación entre el espacio y la conducta humana, quienes diseñan edificios, barrios, espacios públicos y ciudades necesitan del aporte de diversas disciplinas que permitan entender los procesos, el simbolismo y los comportamientos de las personas. Urgen acuerdos internacionales que se cumplan, dada la fragilidad de las instancias locales para intervenir de modo eficaz. Advirtamos, por ejemplo, que la mayor parte del papel que se produce se desperdicia y no se recicla. Las criaturas tienden hacia Dios, y a su vez es propio de todo ser viviente tender hacia otra cosa, de tal modo que en el seno del universo podemos encontrar un sinnúmero de constantes relaciones que se en- trelazan secretamente.171 Esto no sólo nos invita a admirar las múltiples conexiones que existen entre las criaturas, sino que nos lleva a descubrir una clave de nuestra propia realización. En la Eucaristía lo creado encuentra su mayor elevación. : El ocaso de la Edad Moderna, Madrid 1958, 111-112). Es fundamental buscar soluciones integrales que consideren las interacciones de los sistemas naturales entre sí y con los sistemas sociales. Porque no será posible comprometerse en cosas grandes sólo con doctrinas sin una mística que nos anime, sin « unos móviles interiores que impulsan, motivan, alientan y dan sentido a la acción personal y comunitaria ».151 Tenemos que reconocer que no siempre los cristia- nos hemos recogido y desarrollado las riquezas que Dios ha dado a la Iglesia, donde la espiritua- lidad no está desconectada del propio cuerpo ni de la naturaleza o de las realidades de este mundo, sino que se vive con ellas y en ellas, en comunión con todo lo que nos rodea. El hecho de reutilizar algo en lugar de desecharlo rápidamente, a partir de profundas motivaciones, puede ser un acto de amor que exprese nuestra propia dignidad. Todos estos son pecados ».15 Porque « un crimen contra la naturaleza es un crimen contra nosotros mismos y un pecado contra Dios ».16, 9. 229. Muchas personas en estas condiciones son capaces de tejer lazos de pertenencia y de convivencia que convierten el hacinamiento en una experiencia comunitaria donde se rompen las paredes del yo y se superan las barreras del egoísmo. 169   Juan Pablo II, Catequesis (2 agosto 2000), 4: L’Osservatore Romano, ed. 98   Cf. También es necesario acudir a las diversas riquezas culturales de los pueblos, al arte y a la poesía, a la vida interior y a la espiritualidad. Mencionemos, por ejemplo, esos pulmones del planeta repletos de biodiversidad que son la Amazonia y la cuenca fluvial del Congo, o los grandes acuíferos y los glaciares. Así como la vida y el mundo son dinámicos, el cuidado del mundo debe ser flexible y dinámico. Hoy estás vivo en cada criatura con tu gloria de resucitado. 109   Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 1990, 6: AAS 82 (1990), 150. En este sentido se puede decir que, mientras la humanidad del período post-indus- trial quizás sea recordada como una de las más irresponsables de la historia, es de esperar que la humanidad de comienzos del siglo XXI pueda ser recordada por haber asumido con generosidad sus graves responsabilidades. No obstante, si bien el ser humano puede intervenir en vegetales y animales, y hacer uso de ellos cuando es necesario para su vida, el Catecismo enseña que las experimentaciones con animales sólo son legítimas « si se mantienen en límites razonables y contribuyen a cuidar o salvar vidas humanas ».106 Recuerda con firmeza que el poder humano tiene límites y que « es contrario a la dignidad humana hacer sufrir inútilmente a los animales y sacrificar sin necesidad sus vidas ».107 Todo uso y experimentación « exige un respeto religioso de la integridad de la creación ».108. De acuerdo con su visión, el mundo necesita un acuerdo sobre los regímenes de gobernanza global para toda la gama de los llamados “bienes comunes globales", y la encíclica es contundente en afirmar que “la protección ambiental no puede asegurarse solo con base en el cálculo financiero de costos y beneficios. Quiero recoger aquí la equilibrada posición de san Juan Pablo II, quien resaltaba los beneficios de los adelantos científicos y tecnológicos, que « manifiestan cuán noble es la vocación del hombre a participar responsablemente en la acción creadora de Dios », pero al mismo tiempo recordaba que « toda intervención en un área del ecosistema debe considerar sus consecuencias en otras áreas ».109 Expresaba que la Iglesia valora el aporte « del estudio y de las aplicaciones de la biología molecular, completada con otras disciplinas, como la genética, y su aplicación tecnoló- gica en la agricultura y en la industria »,110 aunque también decía que esto no debe dar lugar a una « indiscriminada manipulación genética »111 que ignore los efectos negativos de estas intervenciones. 89   Cf. Cada año desaparecen miles de especies vegetales y animales que ya no podremos conocer, que nuestros hijos ya no podrán ver, perdidas para siempre. La mayor parte de los habitantes del planeta se declaran creyentes, y esto debería provocar a las religiones a entrar en un diálogo entre ellas orientado al cuidado de la naturaleza, a la defensa de los pobres, a la construcción de redes de respeto y de fraternidad. No se trata de destruir y de crear nuevas ciudades supuestamente más ecológicas, donde no siempre se vuelve deseable vivir. Aunque no tengamos conciencia de ello, dependemos de ese conjunto para nuestra propia existencia. 24. ¿Cuáles son los riesgos? Todavía no se ha logrado adoptar un modelo circular de producción que asegure recursos para todos y para las generaciones futuras, y que supone limitar al máximo el uso de los recursos no renovables, moderar el consumo, maximizar la eficiencia del aprovechamiento, reutilizar y reciclar. 135   Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2010, 9: AAS 102 (2010), 46. Al final nos encontraremos cara a cara frente a la infinita belleza de Dios (cf. Ya hemos tenido mucho tiempo de degradación moral, burlándonos de la ética, de la bondad, de la fe, de la honestidad, y llegó la hora de advertir que esa alegre superficialidad nos ha servido de poco. 32. Su testimonio nos muestra también que una ecología integral requiere apertura hacia categorías que trascienden el lenguaje de las matemáticas o de la biología y nos conectan con la esencia de lo humano. En muchos lugares, tras la introducción de estos cultivos, se constata una concentración de tierras productivas en manos de pocos debido a « la progresiva desaparición de pequeños productores que, como consecuencia de la pérdida de las tierras explotadas, se han visto obligados a retirarse de la producción directa ».113 Los más frágiles se convierten en trabajadores precarios, y muchos empleados rurales terminan migrando a miserables asentamientos de las ciudades. La exposición a los contaminantes atmosféricos produce un amplio espectro de efectos sobre la salud, especialmente de los más pobres, provocando millones de muertes prematuras. ¡La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde el suelo! WebEl clima es un bien común, de todos y para todos. Benedicto XVI, Carta enc. La política y la empresa reaccionan con lentitud, lejos de estar a la altura de los desafíos mundiales. La economía asume todo desarrollo tecnológico en función del rédito, sin prestar atención a eventuales consecuencias negativas para el ser humano. El reconocimiento de la dignidad peculiar del ser humano muchas veces contrasta con la vida caótica que deben llevar las personas en nuestras ciudades. Respondiendo a intereses electorales, los gobiernos no se exponen fácilmente a irritar a la población con medidas que puedan afectar al nivel de consumo o poner en riesgo inversiones extranjeras. 27. 47. Este hecho desnaturalizó también el mandato de « dominar » la tierra (cf. La especialización propia de la tecnología implica una gran dificultad para mirar el conjunto. iv. esp. A Message for the Twenty-First Century (1 enero 2001), n. 89. 164. “El clima es un bien común de todos y para todos”y que por tanto todos (individuos, comunidades y Estados) debemos cuidar disminuyendo tanto el uso intensivo de combustibles fósiles de efecto invernadero como limitando los bruscos“cambios de usos del suelo, principalmente la deforestación”para usos agrícolas … Web1. 74   Discurso a los indígenas y campesinos de México, Cuilapán (29 enero 1979), 6: AAS 71 (1979), 209. Esto pone en riesgo el sentido de la lucha por el ambiente. Por eso tampoco pueden reconocerse verdaderos horizontes éticos de referencia. Cada territorio tiene una responsabilidad en el cuidado de esta familia, por lo cual debería hacer un cuidadoso inventario de las especies que alberga en orden a desarrollar programas y estrategias de protección, cuidando con especial preocupación a las especies en vías de extinción. En este tema los términos medios son sólo una pequeña demora en el derrumbe. Es la misma lógica del « usa y tira », que genera tantos residuos sólo por el deseo desordenado de consumir más de lo que realmente se necesita. 40   Cf. ¿Quién paga los costos y cómo lo hará? Él no nos abandona, no nos deja solos, porque se ha unido definitivamente a nuestra tierra, y su amor siempre nos lleva a encontrar nuevos caminos. La mirada de la ciencia se beneficia así de la fe: esta invita al científico a estar abierto a la realidad, en toda su riqueza inagotable. Sin embargo, no todo está perdido, porque los seres humanos, capaces de degradarse hasta el extremo, también pueden sobreponerse, volver a optar por el bien y regenerarse, más allá de todos los condicionamientos mentales y sociales que les impongan. 180. 150. « Mirad las aves del cielo, que no siembran ni cosechan, y no tienen graneros. La miopía de la construcción de poder detiene la integración de la agenda ambiental con mirada amplia en la agenda pública de los gobiernos. Si reconocemos el valor y la fragilidad de la naturaleza, y al mismo tiempo las capacidades que el Creador nos otorgó, esto nos permite terminar hoy con el mito moderno del progreso material sin límites. 200. Caritas in veritate (29 junio 2009), 2: AAS 101 (2009), 642. Caín responde que no lo sabe y Dios le insiste: « ¿Qué hiciste? ap. past. 197. Por eso es necesaria una ecología económica, capaz de obligar a considerar la realidad de manera más amplia. WebEntrevistamos a monseñor Farfán, responsable de la fase sinodal en Perú. No hay que pensar que esos esfuerzos no van a cambiar el mundo. Otras veces se supone que constituyen una subcultura que simplemente debe ser tolerada. 57   Juan Pablo II, Catequesis (26 enero 2000), 5: L’Osservatore Romano, ed. El hombre y la mujer del mundo posmoderno corren el riesgo permanente de volverse profundamente individualistas, y muchos problemas sociales se relacionan con el inmediatismo egoísta actual, con las crisis de los lazos familiares y sociales, con las dificultades para el reconocimiento del otro. Jesús asume la fe bíblica en el Dios creador y destaca un dato fundamental: Dios es Padre (cf. Un desafío principal para el amor de los cristianos de hoy es la difícil situación de los migrantes. Así sólo podrían esperarse algunas declamaciones superficiales, acciones filantrópicas aisladas, y aun esfuerzos por mostrar sensibilidad hacia el medio ambiente, cuando en la realidad cualquier intento de las organizaciones sociales por modificar las cosas será visto como una molestia provocada por ilusos románticos o como un obstáculo a sortear. El ideal de armonía, de justicia, de fraternidad y de paz que propone Jesús está en las antípodas de semejante modelo, y así lo expresaba con respecto a los poderes de su época: « Los poderosos de las naciones las dominan como señores absolutos, y los grandes las oprimen con su poder. Sigue siendo cierto que hay responsabilidades comunes pero diferenciadas, sencillamente porque, como han dicho los Obispos de Bolivia, « los países que se han beneficiado por un alto grado de industrialización, a costa de una enorme emisión de gases invernaderos, tienen mayor responsabilidad en aportar a la solución de los problemas que han causado ».127. Pero lo que se espera es que reconozcan sus propios errores y encuentren formas de interacción orientadas al bien común. Hay lugares que requieren un cuidado particular por su enorme importancia para el ecosistema mundial, o que constituyen importantes reservas de agua y así aseguran otras formas de vida. El Papa argentino afirma que “el clima es un bien común, de todos y para todos” y el impacto más grave de su alteración recae en los más pobres, pero muchos de …